El autismo o el trastorno del espectro autista (TEA), suele estar asociado a desafíos sociales, de lenguaje y de comportamiento. Se habla menos de los problemas de motricidad, pero es común que tanto las habilidades motoras gruesas como las finas se vean afectadas de diferentes maneras y en distintos grados en los niños con TEA.
Las buenas noticias: Las investigaciones sugieren que las intervenciones para los retrasos motores pueden ser efectivas para reducir o cerrar las brechas de desarrollo, especialmente cuando se inician antes de los 3 años. Este estudio examinó a niños de 12 a 36 meses con TEA y confirmó que cuanto antes se empiece, mejor.
¿Cuáles son las afectaciones motoras en los niños con TEA?
Las dificultades con las habilidades motoras pueden interferir aún más con el ya deteriorado funcionamiento social de los niños con TEA. Los desafíos sociales hacen que les resulte difícil interactuar con sus compañeros y no poder seguir con las actividades de grupo que implican habilidades motoras gruesas o finas (juegos de persecución, por ejemplo, o tomar turnos para añadir piezas a un rompecabezas) puede hacerlo aún más difícil. A su vez, al no participar en actividades relacionadas con la motricidad, los niños pierden oportunidades de mejorar sus habilidades motrices.
Los desafíos motrices también pueden disminuir la motivación cuando se trata de la actividad física en general, lo cual, con el tiempo, puede afectar la salud a largo plazo.
¿Qué causa los desafíos motores relacionados con el TEA?
Los desafíos motores en los niños con TEA pueden ser causados por:
Diferencias en el cerebro, que pueden interferir en el funcionamiento conjunto de los sistemas sensoriales y motores, lo que resulta en un movimiento ineficiente y/o descoordinado.
Bajo tono muscular o hipotonía, que puede interferir con el desarrollo motor.
Ansiedad en situaciones sociales, lo que puede dar lugar a que se rehúse a la actividad física grupal que desarrolla las habilidades motoras.
Cuestiones cognitivas, que pueden afectar a la planificación motora, o al proceso de planificación y ejecución de tareas de movimiento.
Hipermovilidad articular generalizada o especialmente articulaciones flexibles, que requieren una fuerza muscular adicional que los niños pueden no tener.
Músculos tensos, lo que puede causar la marcha en puntillas, porque los músculos de la pantorrilla son más difíciles de estirar.
¿Cuáles son las intervenciones comunes para los desafíos motores relacionados con el TEA?
Hay muchas intervenciones para mejorar las habilidades motoras, que son abordadas por un fisioterapeuta, un terapeuta ocupacional o una combinación de ambos. La terapia dependerá de las necesidades de tu niño, pero se centra en el fortalecimiento de los músculos, la mejora del equilibrio, la coordinación y la práctica de varias habilidades motoras gruesas y finas.
Debido a que los problemas motores pueden superponerse con otras áreas del desarrollo, es importante que todos los terapeutas que trabajan con tu niño se comuniquen entre sí acerca de los objetivos, las intervenciones, las preocupaciones y el progreso.
Consejos para padres y cuidadores
- Si tu hijo no ha sido evaluado pero sus habilidades motoras gruesas y / o finas se retrasan constantemente, consulta con el pediatra para una evaluación. Puedes obtener más información en nuestro artículo sobre intervención temprana.
- Si el desarrollo motor de tu niño no está en su plan de tratamiento inicial, llévalo con su equipo de intervención. A menudo se priorizan las intervenciones sociales y de lenguaje, pero también es importante disminuir las brechas de desarrollo de las habilidades motoras lo antes posible.
- Sigue en casa el ejemplo de tu fisioterapeuta y/o terapeuta ocupacional. Pregunta por formas específicas de apoyar los objetivos de la terapia en el hogar.
- Recuerda que tu niño no puede iniciar tareas de motricidad gruesa o fina por sí solo, por lo que es importante comprometerlo y motivarlo para que participe en actividades que apoyen esas habilidades.
Para leer más sobre TEA, dirígete a nuestros artículos sobre autismo, una versión general; autismo y desarrollo socio-emocional; autismo y desarrollo del lenguaje, autismo y desarrollo cognitivo, y autismo y procesamiento sensorial.